Y llegó la navidad

Hoy es nochebuena, y como tal, es una noche mágica, sobre todo para los más pequeños de la casa. Todavía me acuerdo cuando me regalaron mi bebé-muñeca, me ausenté, al volver y abrir la puerta de mi habitación, allí estaba, no sé cómo lo hacían, pero parecía tan real o cuando me regalaron la bicicleta, esa inocencia era tan bonita. Luego nos siguen haciendo ilusión los regalos, pero de otra forma. Al final, lo que cuenta es reunir a la familia en estas fechas y aprovechar a hacer las cosas que no haces el resto del año, como jugar al parchís, las cartas, party, etc. Yo sólo lo hago en dos fechas, navidad y verano, por eso supongo que son los dos momentos que más me gustan, también son fechas muy entrañables y por desgracia no todo el mundo las celebra igual, porque siempre falta alguien que se ha ido, que no puede estar o que no está pasando por su mejor momento, pero no dejas de acordarte de ellos. Por ello, en estos momentos mandaremos toda la energía a esas personas que les hace mucha falta.

Yo este año he decidido acordarme de todas esas personas que me han dado buenos momentos y que de alguna forma han estado ahí y les he escrito, puede resultar a veces un mensaje artificial por ser estas fechas, pero algún día hay que empezar a hacerlo y si es la excusa para ponerse en contacto, pues bienvenido sea. Pienso que debemos valorar todo lo que nos han aportado o aportan las personas que conocemos y dar gracias porque de alguna forma, aún en la distancia o viéndonos poco, sigan ahí.

El domingo pasado quedamos un grupo de compañeras de mi antiguo trabajo e hicimos la visita navideña, me encantó. Me hizo mucha ilusión volver a verles a todos ellos, fue un gran día y esos momentos si deberían ser una costumbre.

El viernes se acabó la campaña en el trabajo, la etapa podría calificarla como positiva, finalmente se han portado bastante bien con nosotros, pero también a la inversa, creo que hemos realizado un buen trabajo en grupo. Aunque siempre haya cosas que mejorar de cara a la organización, creo que la implicación debería darse en todos los componentes del grupo para que el resultado sea más que fructífero. No sé si me volverán a llamar, desearía que sí, porque me gusta trabajar, pero si no es así, me quedo con todo lo aprendido no sólo a nivel laboral, sino a nivel emocional, la capacidad de superación y de reivindicación de todos nosotros ha sido más que notable.

Me pasó una anécdota, en un trabajo extra que hicimos que nos pagaban por ello, a mí me daban más dinero del que me correspondía, lo advertí y finalmente gané por honrada, eso sí, tuve que escuchar muchísimas risas, cosa que no entendí, pero bueno tanto para lo bueno como para lo malo, creo que debemos alzar la voz. Siempre he actuado de la misma manera, si gano unas risas, pues debo alegrarme también.

Semana con mucho trabajo, pero mucha unión de equipo, risas, buena organización entre nosotros y también disfrute. El sábado fui a ver “El cavernícola” y me gustó bastante, la recomiendo. La teoría de cazadores-recolectores fue bastante curiosa. Desear que pasemos una feliz semana de fiestas y vacaciones, en mi caso, muy socializada, pero encantada por ello, es una muy buena manera de aprovechar el tiempo.

Y me quedo como propósito con esto: “No te empeñes en ser conocido sino en ser alguien que vale la pena conocer”