domingo, 21 de octubre de 2012

Los regalos



Los cumpleaños, son momentos para juntarnos con amigos, familiares, en definitiva, seres queridos, allegados con los que nosotros nos mostramos tal y como somos, nos divertimos y pasamos un buen rato. Son días en los que esperas que las personas que más te quieren o que tú más quieres, tengan el precioso detalle de acordarse de ti, pero ya está, no esperas más, gratitud, muestras de cariño, de ánimo. Es por eso, que tú decides mostrarte complaciente, agradecido; cuando decides organizar un festejo, celebración o simplemente una reunión en una casa, bar, parque; el lugar lo pones tú, pero no es lo importante, sino que esas personas que tú quieres, acepten esa invitación y se lo pasen bien contigo.

Como he dicho anteriormente, sólo esperas muestras de cariño y que esas personas quieran permanecer a tu lado en ese instante, nada más. Tú no esperas, ni deseas que esas personas tengan la obligación de hacerte un regalo, me da igual, el tamaño, precio, altura, calidad, color…También es cierto que si esas personas quieren corresponderte con un regalo, sería de mala educación que tú no lo aceptases, pero esto no tiene que obligar a los demás a hacer lo mismo.

En este tiempo que tener un trabajo, ya es de por sí, un regalo. Las personas no entienden que tú no puedas hacer regalos, no pueden o no quieren entenderlo.  No conozco a nadie que tenga dinero y no quiera complacer a las personas que más aprecia con un regalo, todos lo hacemos, somos consumidores y siempre hay cosas que pueden venir bien o que hacen falta y ahí estás tú para complacer. A veces, esa circunstancia no puede darse porque tú no tienes medios para alcanzar ese objetivo. Tampoco creo que sea algo por lo que haya que alarmarse, para eso existe la comprensión, pero en momentos indicados, brilla por su ausencia.


Veamos la definición de regalo: “Lo que se da a alguien sin esperar nada a cambio, como  muestra de afecto o agradecimiento”.
Creo que la definición está muy clara, sin esperar nada a cambio, lo que significa que tú no tienes la obligación de recibir nada a cambio o ¿si?. ¿Cuándo hacemos un regalo esperamos la vuelta, que se parezca a lo que yo ya te he dado a ti? Parece como una especie de contrato u obligación en la que yo te doy si tú me das a mí, como un quid pro quo.

No estoy menos de acuerdo, creo que lo bonito de estas cosas es buscar la ilusión, la alegría, la complacencia, pero nunca el beneficio. La amistad, el amor o a la familia, no están asentadas en estas bases. Además, hay muchas formas de hacer un regalo, un abrazo, una canción bonita, una cena, un beso, una carta o unas palabras. Aunque estas formas tienen que venir añadidas al pack objeto de tus deseos, pero nunca sin ellas. Esto, como otras cosas se van aceptando y asimilando a medida que vas cumpliendo años y no antes, bueno al menos, eso espero…Que un niño proteste si se queda sin regalo lo entiendo, un adulto, me costaría muchas horas para poder asimilarlo, es más, creo que jamás lo asimilaría. Aunque claro, yo carezco de toda verdad y como los colores, hay mucha variedad en la manera de pensar de cada cual.

Para mí, el mayor regalo me lo ha dado mi hermano y su mujer, al concebir esa cosa tan pequeña y tan bonita llamada Mateo. Orgullosa de poder calificarme como tía y eso es lo más bonito que pueden darnos, ofrecernos, para poder disfrutarlo, reírnos con él, verle crecer y sobre todo ver babear a cada miembro de la familia, es lo más maravilloso del mundo. Sólo espero que este pequeñazo, sí espere muchas muestras de cariño en su más diversas formas y sí, por supuesto regalos, porque para eso es el niño. También sé que al final, sabrá valorar lo verdaderamente bueno por encima de lo demás, felicidad es lo que siento, sus padres estarán plenos, verle dormir, reír, llorar, etc., lo más humanamente hermoso que la vida nos puede dar.

 Muchas veces me han dicho que las cosas no hay que esperarlas, yo creo que lo bueno siempre hay que esperarlo, lo malo jamás, ni las malas intenciones, ni las malas reacciones, tratar de ponernos en el lugar de la otra persona, debería ser nuestra máxima, no cuesta tanto y eso es un verdadero regalo.

No hay comentarios:

Publicar un comentario